Hace poco conversaba con un amigo sobre lo incómodo que resulta "la seguridad" que puede desarrollar una persona, esa proyección y glow up que muchos tienen de un momento a otro e inevitablemente viene del interior de cada uno. Parece un fenómeno algo extraño, pero nuevamente desde la subjetividad me gustaría conversar del tema.

Desde mi experiencia, como mujeres nos enfrentamos a miles de cosas bajo el estigma del género, y la estética es un punto muy importante. Se asocia lo bello a un movimiento propio de la época y debemos vivir con esa premisa de que nacimos para mucho, entre ello "ser hermosas".

Y bajo ese contexto, es extraño que muchos se enfrenten al tema de si la belleza se atribuye a muchos elementos propios de ese estereotipado concepto de la "belleza interior" y otros hablan de que el físico es importante.

El punto es que el tema es amplio, y si me extiendo aquí probablemente nunca llegue al punto que quiero llegar y esa seguridad que a muchas nos cuesta adquirir o mantener y al final es objeto de muchas críticas. Cómo caminas o te mueves. Por un lado, cuando te sientes segura, yo siento que irradias una nueva energía maravillosa, y en mi perspectiva es la construcción de una obra interna, que para muchos suele ser incómoda.

Por ejemplo, se critica si decides cuidar tu físico o adquirir una estética bajo el maquillaje o la ropa acorde para lo que en el momento resulta atractivo (sí, la moda es algo de años y daños, pero ese es otro tema). Lo cierto es que en un momento pasas a ser puesta bajo calificativos y una frase que me han dicho incluso por un simple cambio de look es "te crees mejor que los demás".

Porque aparentemente para pequeñas personas resulta poco humilde invertir en nuestro exterior. Luego están esas mismas personas quienes, por adquirir un look más cómodo y un poco en contra de lo anterior, te catalogan como "desaliñada o descuidada".

Y ahí es cuando comienzas a pensar que no hay manera de complacer al mundo y aquí te cuento un secreto: ¡NO TIENES POR QUÉ HACERLO!

Una de las cosas más difíciles cuando colocas límites, reconstruyes tu autoestima y miras a tu alrededor priorizándote en más de un sentido es la muy exagerada crítica.

Para mí, no eres poco humilde cuando celebras tus éxitos o decides compartir una meta al mundo, tampoco cuando cambias tu ya hermosa apariencia y mucho menos si inviertes en lo que crees te hará ver como esa versión que quieres lograr.

Lo cierto es que tu seguridad, al mostrar al mundo de lo que eres capaz, será como una luz cegadora, pero eso no tiene por qué alejarte de tu realidad y desvirtuarte de tus valores. Es como los grandes escritores que sueñan con ser leídos por millones de personas en el mundo, tener ambición no es un mal proceder, así que no te detengas a mirar a esas personas que no te ayudan a construir y además parecen un desafío más.

Celebra tus éxitos, construye tu yo segura y maravillosa, y nunca olvides que ahora estás donde estás por lo capaz que eres y por lo mucho que Dios te ha brindado.

Recently I was talking with a friend about the uncomfortable “security” that a person can develop, that projection and glow up that many have from one moment to another and inevitably comes from within each one of us. It seems a somewhat strange phenomenon, but again from subjectivity I would like to talk about it.

From my experience, as women we face thousands of things under the stigma of gender, and aesthetics is a very important point. Beauty is associated with a movement of the time and we have to live with the premise that we were born to do a lot, including “being beautiful”.

And under that context, it is strange that many face the issue of whether beauty is attributed to many elements of that stereotypical concept of “inner beauty” and others talk about the physical is important.

The point is that the topic is broad, and if I expand here I will probably never get to the point I want to get to and that security that many of us have trouble acquiring or maintaining and in the end is the subject of much criticism. How you walk or move. On the one hand, when you feel confident, I feel that you radiate a wonderful new energy, and in my perspective it is the construction of an internal work, which for many is often uncomfortable.

For example, it is criticized if you decide to take care of your physique or acquire an aesthetic under makeup or clothes according to what is attractive at the moment (yes, fashion is something of years and damages, but that's another topic). The truth is that in a moment you are put under qualifiers and a phrase that has been said to me even for a simple change of look is “you think you are better than others”.

Because apparently for little people it is not very humble to invest in our exterior. Then there are those same people who, for acquiring a more comfortable look and a bit against the above, label you as “scruffy or unkempt”.

And that's when you start to think there's no way to please the world and here's a secret: YOU DON'T HAVE TO DO IT!

One of the hardest things when you set boundaries, rebuild your self-esteem and look around prioritizing yourself in more ways than one is the very exaggerated criticism.

To me, you are not unhumble when you celebrate your successes or decide to share a goal to the world, neither when you change your already beautiful appearance and much less if you invest in what you believe will make you look like that version you want to achieve.

The truth is that your confidence, when you show the world what you are capable of, will be like a blinding light, but that doesn't have to take you away from your reality and distort you from your values. It's like the great writers who dream of being read by millions of people in the world, having ambition is not a bad thing to do, so don't stop to look at those people who don't help you build and also seem like another challenge.

Celebrate your successes, build your confident and wonderful self, and never forget that you are where you are now because of how capable you are and how much God has given you.